El cerebro de la iglesia
Mensajes Cristianos
Mensajes Cristianos Predica de Hoy: El cerebro de la iglesia
Introducción
La iglesia se asemeja a un cerebro humano en el que Cristo da el equilibrio y la cordura necesarios. En ausencia de Él somos presa del diablo siguiendo a nuestro perverso corazón. El cerebro humano es una creación muy compleja, pero podemos distinguir dos partes importantes en él, el hemisferio izquierdo y el derecho.
El hemisferio derecho está relacionado con la afectividad, las emociones, el simbolismo, con nuestro lado místico, con la capacidad artística y musical, los matices, el pensamiento intuitivo y la perspectiva global de las cosas (síntesis). Para el hombre hay muchas verdades, todo depende de cada cual y hay muchos caminos distintos para llegar a nuestro objetivo. La Biblia también lo llama el corazón y nos dice que su naturaleza es perversa y engañosa.
El hemisferio izquierdo tiene que ver con la lógica, la razón, el análisis y la capacidad matemática. El hemisferio izquierdo tiende a segmentar los problemas en partes (el llamado reduccionismo). Piensa en términos de blanco y negro, verdad y mentira, bueno y malo. Dios suele hablarnos muchas veces en esos términos en la escritura.
Se podría pensar que ambos hemisferios actúan oponiéndose el uno al otro como fuerzas antagónicas. Sin embargo, esto no es así puesto que se complementan en lugar de oponerse mutuamente. El lado izquierdo se asemeja más al pensamiento masculino y el derecho al femenino.
El cerebro del ser humano y por extensión el de la iglesia es como una balanza con su lado izquierdo en el que actúa Cristo dando el predominio necesario para su correcto funcionamiento. Cuando Cristo está ausente de ella el diablo actúa en el lado derecho haciendo para que éste predomine. La consecuencia es que el grupo entero va hacia la destrucción.
Hemisferio izquierdo y derecho en la iglesia
En la Biblia la iglesia es representada como una mujer en la que las palabras de Cristo representan la sabiduría o la cordura. De acuerdo al predominio de uno u otro hemisferio, en el evangelio podemos dividir a las iglesias en dos tipos:
Iglesias de hemisferio izquierdo guiadas por un varón (Jesucristo) en las que la palabra de Dios es lo más importante. Se predica el evangelio de Cristo. Son iglesias de sana doctrina de carácter conservador. Corresponde a una mujer virtuosa (Proverbios 31) y sensata que escucha a su prometido (Cristo)
Iglesias de hemisferio derecho en las que la palabra de Dios no es importante y se siguen ideas y filosofías humanas. Se predica un evangelio distinto al de Cristo. Ejemplo: iglesias carismáticas. Corresponde a una mujer insensata (Proverbios 9:13-18) o a una ramera que no escucha o menosprecia las palabras de su prometido.
Las primeras iglesias verdaderamente tienen la mente de Cristo, mientras que las segundas son extraviadas por mensajes seductores de extraños.
Observamos en muchas iglesias actuales del segundo grupo varias tendencias claras:
a. Preponderancia de la música en los cantos de adoración
Las canciones de adoración están mayormente guiadas por la música y la letra actúa como un mero acompañamiento. A menudo la letra son incontables repeticiones de lo mismo, como si fuera un mantra. La letra ha perdido su predominancia en la adoración siguiendo la corriente del mundo que hacia 1980 aproximadamente cambia también esta tendencia.
Los himnos de carácter marcial que ilustran a un pueblo de Dios combatiente y alerta pasan a un tono relajado y pasivo, como si todo ya hubiera sido conseguido. Los congregantes incluso cierran sus ojos para una experiencia emocional más profunda, como si quisieran perder contacto con la realidad.
b. Preponderancia de la adoración musical sobre el sermón
El clímax del servicio ya no es el mensaje, sino la música. El mensaje suele tener poco contenido, poca profundidad y su contenido no es bíblico. Abundan mensajes centrados en el hombre en el que Dios es sólo un siervo del hombre que le provee de riquezas y salud.
c. Importancia creciente de elementos simbólicos y místicos
Los elementos simbólicos y ceremoniales abundan cada vez más. Puede ser una llamada al altar, como si el altar fuera un lugar mágico en la iglesia. Se hacen círculos de oración con las personas tomadas de la mano. Las brujas usan círculos de una forma similar.
Se ora hacia los cuatro vientos colocándose en dirección de los cuatro puntos cardinales. Las brujas hacen cosas similares. Se construye un arca del pacto y se coloca en el altar.
Oración en lenguas extrañas que nadie entiende pero son muy espectaculares aunque nadie sepa para que sirven. Las lenguas extrañas no proceden de Dios.
Implementación de danzas. Las danzas como todo lo artístico, añaden un carácter místico y ceremonial pero no ayudan en nada al culto y distraen al creyente de las cosas importantes.
Profecía emitida en la iglesia por tal o cual hermano con supuestos dones. No existen profecías modernas, la escritura está completa.
Se retiran las sillas para que la gente se acueste en el suelo y se relajen en la presencia de música (soaking u oración contemplativa). Es un sustituto de la oración bíblica. La contemplación nos induce a un estado de relajación y nos impide estar alerta. Estos estados son los más propicios para contactar con seres demoníacos.
Uso de diversos objetos (espadas, mantos, aceite para ungir), para dar un aire místico al servicio. Fomenta la idolatría y distorsiona las creencias.
Desconectar al hemisferio izquierdo
Todo lo mencionado anteriormente está encaminado a desconectar al hemisferio izquierdo sobre el que actúa Cristo y seguir al derecho con su seductora irracionalidad. Si imaginamos a la iglesia como una persona, vemos que es una persona que abandona su lado lógico y racional y se sumerge en un oscuro océano de intuición, emoción y misticismo. Satanás para engañar con mayor eficacia necesita de alguna forma feminizar la iglesia, para atacarla de igual forma que atacó a Eva antes que a Adán por ser más vulnerable.
Iglesias de hemisferio derecho son iglesias sin pastor (sin Cristo)
La prometida (la iglesia) deja de escuchar a Cristo coqueteando con hombres extraños y dejándose seducir por sus palabras dulces lisonjeras. Estas iglesias han perdido su y racionalidad procedentes de Cristo porque no tienen temor de Dios ni de su palabra. Están sumergidas en un mar de misticismo, emociones y fenómenos extraños.
La iglesia siempre ha sido guiada por Cristo y por su palabra (Juan 10:27), de igual forma que el pastor con su palabra dirige al rebaño. Si el rebaño deja de oír al pastor el rebaño se pierde y cae en poder de un extraño. Una mujer es enamorada por las palabras dulces, pero también puede ser engañada por tales palabras. Tal y como fue engañada Eva al despreciar la palabra de Dios, cuando la iglesia abandona la Biblia, es como una mujer insensata, vulnerable a los engaños de todo tipo (Juan 15:5).
Por eso hay iglesias guiadas por la palabra de Dios (hemisferio izquierdo) e iglesias no guiadas por ella (hemisferio derecho), cuando la palabra de Dios está ausente o es secundaria lo que queda es irracionalidad, misticismo, emocionalismo y conocimiento intuitivo. Todas estas características mencionadas corresponden al hemisferio derecho del cerebro humano.
La nueva era
La nueva era insiste con pesadez en que debemos desconectar nuestro hemisferio izquierdo, la parte racional del ser humano y activar el derecho. La diferencia entre el pensamiento izquierdo y el derecho equivale a comparar un cuadro figurativo y otro abstracto.
En el primero podemos distinguir todo y entender claramente los personajes y la escena. En el segundo todo es borroso y está al criterio del espectador, de manera que distintas personas verán cosas diferentes conforme a sus mentes. La interpretación de un cuadro abstracto no es más que una pareidolia que habla más de nosotros mismos que del mismo cuadro. En definitiva, vemos lo que queremos ver.
Cuando no seguimos a Dios, nosotros mismos nos constituimos en dioses y seguimos a nuestras pasiones (el emocionalismo propio del hemisferio derecho). Al diablo le interesa poderosamente fomentar nuestro lado derecho del pensamiento para apartarnos de Dios. Así como la Biblia establece el liderazgo espiritual para el varón (Efesios 5:23) y sobre él Cristo, igualmente el hemisferio izquierdo debe dominar sobre el derecho y actuar conjuntamente con él, pero de forma complementaria.
La iglesia de hoy, está plagada de apostatas, falsos maestros y falsos profetas. Cristo dijo que nos enviaba como ovejas entre lobos, sin un pastor es cuestión de tiempo que nos devore el lobo (Mateo 10:16). ¿Cómo te vas a comportar, como una mujer virtuosa atenta a las palabras de su prometido o como una insensata que escucha los dichos seductores de los extraños?
© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.