Tributad a Jehová

Tributad a Jehová

Predicas Cristianas Prédica de Hoy: Thanksgiving – Tributad a Jehová

© José R. Hernández, Pastor
El Nuevo Pacto, Hialeah, FL. (1999-2019)

Predicas Cristianas

Predicas Cristianas Lectura Bíblica: Salmos 96:6-8

Introducción

Como todos sabemos en aproximadamente dos semanas, en este país se estará celebrando el día de acción de gracias (Thanksgiving). Y en realidad es un día muy bonito ya que esta tradición fue establecida por los peregrinos de la colonia establecida en Plymouth, Massachussets, con un solo propósito; el propósito de este día de celebración fue para darle gracias a Dios por las bendiciones que ellos habían recibido y continuaban recibiendo.

Aunque al principio todos celebraban este día en diferentes fechas, eventualmente el día de acción de gracias (Thanksgiving) fue establecido como el último jueves de noviembre. Pero el problema que existe es que a través del tiempo, el significado original de este día ha ido perdiendo su valor. En actualidad la mayor parte de las personas solo ven este día como un día menos de trabajo, lo ven como un día para una fiesta o reunión familiar, y nada más.

Thanksgiving

Como todos sabemos, nosotros hoy aquí celebraremos el día de acción de gracias (Thanksgiving) como iglesia; después del servicio nos reuniremos y compartiremos una deliciosa cena. Pero antes deseo que reflexionemos en el significado tan bello de este día, así que pasemos ahora a la Palabra de Dios.

Salmos 96:6-8Alabanza y magnificencia delante de él; Poder y gloria en su santuario. 7 Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos, Dad a Jehová la gloria y el poder. 8 Dad a Jehová la honra debida a su nombre; Traed ofrendas, y venid a sus atrios.

Para poder tener un mejor entendimiento del mensaje que Dios tiene para nosotros en el día de hoy, nos será necesario enfocarnos en la definición de la palabra “tributad”. Esta palabra origina de la palabra “tributar” que es definida como:

1. Entregar el vasallo al Señor en reconocimiento del señorío, o el súbdito al estado para las cargas y atenciones públicas, cierta cantidad en dinero o en especie.

2. fig. Ofrecer o manifestar veneración como prueba de agradecimiento o admiración.

3. Ar. Dar a treudo [1].

¿Por qué debemos enfocarnos en la definición de esta palabra?

La razón por la que debemos concentrarnos en la definición de esta palabra es porque generalmente, cuando las personas piensan en tributar, inmediatamente asocian esta palabra con el dinero o algún tipo de pago monetario, pero como podemos ver, esta palabra aunque puede ser usada para describir lo monetario, para el creyente esta palabra tiene un significado mucho superior a esto.

Digo que tiene un significado mucho superior, porque la realidad de todo es que Dios no está mirando cuanto ofrendas o dejas de ofrendar; lo que Dios está mirando es tu corazón. Esto es algo que se nos dice bien claro en Proverbios 20:27 cuando leemos: “…Lámpara de Jehová es el espíritu del hombre, La cual escudriña lo más profundo del corazón…”

¿Qué es lo que Dios busca de Su pueblo?

Dios no está buscando tu dinero, Dios esta buscando que confiemos en Él en todo momento. En otras palabras, Él está buscando que fortalezcamos nuestra fe. Dios está buscando que hagamos lo correcto ante Sus ojos, Dios está buscando que demostremos el poder de Su grandeza produciendo buenos frutos. Habiendo establecido estos breves detalles, mantengamos el significado de esta palabra en mente, y continuemos ahora con nuestro estudio de hoy.

Lo primero que encontramos aquí es que se nos dice: “…Alabanza y magnificencia delante de él; Poder y gloria en su santuario…” Yo sé que existe un buen número de personas, que piensan que no tienen nada por que dar gracias.

Sé que existe un buen número de personas, que se encuentran atravesando por situaciones difíciles; especialmente en estos tiempos de incertidumbre por la que está atravesando esta nación, pero a pesar de cualquier dificultad por la que podamos estar atravesando, siempre existe algo por lo que debemos dar gracias a Dios, y alabar Su santo y divino nombre. Reflexionemos en esto por un momento, y determinemos si lo que les digo tiene sentido.

¿Qué tenemos que agradecerle nosotros a Dios?

Sé que lo que les voy a decir lo he repetido en numerosas ocasiones, pero el hecho de que estemos aquí es una razón para darle gracias a Dios. ¿Por qué? Porque la realidad es que existen numerosas personas en este mundo, que quisieran poder reunirse en un lugar para alabar a Dios y no pueden. Digan conmigo: ¡Gracias a ti mi Dios por este lugar!

El hecho de que podamos escuchar estas alabanzas que acabamos de escuchar, es una razón para darle gracias a Dios. ¿Por qué? Porque la realidad es que existen numerosas personas en este mundo, que no puede oír, quienes desean escuchar alabanzas a Dios pero no pueden. Digan conmigo: ¡Gracias a ti mi Dios porque puedo oír!

El hecho de que podamos expresarnos, cantar y alabar libremente, es una razón por la que tenemos que darle gracias a Dios. ¿Por qué? Porque la realidad es que existen numerosas personas en este mundo, que viven en países donde la libertad que nosotros tenemos no existe. Digan conmigo: ¡Gracias a ti mi Dios por la libertad que tu nos has dado!

El hecho de que hayamos abiertos nuestros ojos hoy es una razón por la que debemos darle gracias a Dios. ¿Por qué? Porque esto quiere decir que Dios nos ha bendecido con un día más de vida, de esa forma proporcionándonos una nueva oportunidad para acercarnos más a Él; proporcionándonos otra oportunidad de arrepentirnos de nuestras faltas y pecados. Digan conmigo: ¡Gracias a ti mi Dios por un día mas de vida!

El hecho de que compartiremos de una exquisita cena al terminar el servicio, es una razón por la que debemos darle gracias a Dios. ¿Por qué? Porque Dios nos ha bendecido abundantemente para que podamos disfrutar de esta cena. Digan conmigo: ¡Gracias a ti mi Dios por los alimentos y las bendiciones que tu nos has proporcionado!

La palabra de Dios nos dice: “…Alabanza y magnificencia delante de él; Poder y gloria en su santuario….” Dile a la persona que tienes a tu lado, ¡alaba a Dios! Digan conmigo ¡gracias Padre por tu bondad!

Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos

Continuando leemos: “…Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos, Dad a Jehová la gloria y el poder…” Hermanos esto es algo que todos tenemos que hacer. Tenemos que proclamar la misericordia, la gloria y el poder de Dios en todo momento. Esto no es algo que hacemos con dinero, es algo que hacemos a través de nuestro comportamiento; el creyente tributa a Jehová a través del fruto que producimos. Y es por eso que el Señor en Mateo 3:8 nos dice: “…Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento…”

Tenemos que reconocer, y demostrarle al mundo, que el poder de Dios es lo único que puede solucionar todo problema. El poder de Dios es lo único que nos puede dar la paz en momentos de dificultad..

Esto es algo que queda bien reflejado en Filipenses 4:6-7 cuando leemos: “…Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús…” Solo por el poder y misericordia de Dios podemos lograr esto.

El mundo no entiende como los cristianos pueden mantener su fe a través de situaciones difíciles, porque el mundo busca la solución en el mundo, pero el verdadero creyente la busca en el poder de Dios. En el poder de Dios está nuestra fortaleza; en el poder de Dios depositamos nuestro futuro.

¿Cómo podemos tributar a Jehová?

Lo hacemos fortaleciendo nuestra fe; lo hacemos produciendo buenos frutos; lo hacemos depositando nuestra confianza absoluta en su gloria y poder. Dile a la persona que tienes a tu lado: “…Dad a Jehová la gloria y el poder…”

Continuando leemos: “…Dad a Jehová la honra debida a su nombre; Traed ofrendas, y venid a sus atrios…” Como fieles creyentes tenemos que rendirle a Jehová la honra debida a Su nombre. Nunca se nos puede olvidar que solo por la misericordia de Dios, ahora nosotros nos podemos acercar a Él confiadamente, y hallar la solución a nuestras aflicciones o dificultades.

Fíjense como dice Hebreos 4:16 «…Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro…»

¿Por qué nos podemos ahora acercar a Dios de esta manera? ¿Es porque somos tan buenos y justos que Dios nos acepta? ¿Es porque hacemos tantas buenas obras que ahora podemos acercarnos al trono confiadamente?

La respuesta es no; la única razón por la que ahora tenemos acceso al trono de Dios es: “…Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna…” (Juan 3:16). Digan conmigo: gracias Señor por tu gracia.

Traed ofrendas, y venid a sus atrios

La Palabra aquí nos dice: “…Traed ofrendas, y venid a sus atrios…” Como les dije al inicio, la palabra “tributar” también significa la ofrenda de dinero, como lo es en este caso, pero este no es el único caso.

Esto es algo que queda bien reflejado en Romanos 15:15-16 cuando leemos: “…Mas os he escrito, hermanos, en parte con atrevimiento, como para haceros recordar, por la gracia que de Dios me es dada 16 para ser ministro de Jesucristo a los gentiles, ministrando el evangelio de Dios, para que los gentiles le sean ofrenda agradable, santificada por el Espíritu Santo…” ¿Cuál es la mejor ofrenda que tú le puedes ofrecer a Dios?

La mejor ofrenda que tú le puedes ofrecer a Dios es tu amor, tu devoción, y tu fidelidad. La mejor ofrenda que tú le puedes ofrecer a Dios es proclamar la grandeza de Su nombre, y predicar la fe de Jesucristo, y las virtudes cristianas. La mejor ofrenda que tú le puedes hacer a Dios es presentarle a aquellos que te rodean el plan de salvación, e invitarles a la iglesia. Dile a la persona que tienes a tu lado: “…Dad a Jehová la honra debida a su nombre…”

Para concluir.

Este día de celebración tan bello, lentamente, pero de manera segura, ha ido perdiendo su verdadero significado. Te digo hoy, no permitas que esto suceda en tu hogar. No permitas que este día de acción de gracias (Thanksgiving), tengas una casa llena de familiares e invitados, pero que falte Dios.

Existen tantas cosas por la que debemos darle gracias a Dios que no existe suficiente tiempo para enumerarlas todas. Ya que como he dicho en más de una ocasión, existe una bendición de Dios en todo.

En solo unos días celebraremos el día de acción de gracia (Thanksgiving), pero para nosotros, es decir, para nosotros los que hemos hecho un compromiso con Cristo, el día de acción de gracia son todo los días de nuestra vida.

Recordemos en esta fecha de acción de gracias, y en todo día que el Señor nos ofrece, que tenemos el poder de servir de ejemplo. Recordemos que tenemos que servir de ejemplo en nuestra familia, con nuestras amistades, y con nuestros compañeros de trabajo.

Recordemos: “…Alabanza y magnificencia delante de él; Poder y gloria en su santuario. 7 Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos, Dad a Jehová la gloria y el poder. 8 Dad a Jehová la honra debida a su nombre; Traed ofrendas, y venid a sus atrios…”

Tributa hoy a Jehová tu corazón, devoción y amor. Hermanos, hoy es un día muy especial, porque estamos juntos y en armonía en la casa de nuestro Padre, celebrando el día de acción de gracias. ¿Cuántos dicen gracias Padre por todas las bendiciones que nos has dado?

[1] Diccionario de la Real Academia Española

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