Fuisteis enriquecidos en él
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Predicas Cristianas
Predicas Cristianas Predica de Hoy: Fuisteis enriquecidos en él
Introducción
Una gran realidad es que nosotros vivimos en un mundo pagano. Para que entiendan bien lo que les quiero decir, deseo detenerme aquí por un breve momento para exponerles la definición de esta palabra. Pagano: aplícase a los idólatras y politeístas (doctrina de los que creen en la existencia de muchos dioses), especialmente a los antiguos griegos y romanos [1]. La razón por la que digo que vivimos en un mundo pagano, es porque las personas prefieren creer en todo menos en el Dios verdadero.
Por ejemplo; en la sociedad y/o cultura hispana, las personas creen, y si no creen, por lo menos respetan o le tienen miedo a la brujería, santería, hechicería y demás. Es por eso que no es fuera de lo común ver como personas hispanas de todos los caminar de la vida, le rinden homenaje y/o veneran artefactos, estatuas, piedras, metales, y tantísima muchas otras cosas. Y no solo esto si no que también les ofrecen sacrificios de sangre y muchísimos otros ritos que yo personalmente desconozco.
En la sociedad y/o cultura anglosajón, las personas si no creen, por lo menos respetan y le tienen miedo a la magia, a las brujas y brujos, hechicerías, y demás. Es por eso que no es fuera de lo común encontrar como existen miles de personas que practican Wicca. ¿Qué es Wicca?
Wicca es un movimiento predominantemente occidental, cuyos seguidores practican la brujería y la adoración de la naturaleza, y que lo ven como una religión basada en tradiciones pre-cristianas de Europa. Y es una religión que se extendió por Inglaterra en la década de 1950 y, posteriormente, atrajo seguidores en Europa y los Estados Unidos [2].
Y no hablemos acerca de las miles de religiones que existen en todos los países del mundo. Miles de religiones que le rinden culto a dioses y diosas basado en la mitología griega, la religión romana de antigüedad, y todas la otras religiones y cultos que han sido inspirada por el diablo. La realidad es que si nos pusiéramos a citar ejemplos de todas las religiones del mundo no tendríamos para cuando acabar.
Y son por estas razones por las que les digo que vivimos en un mundo pagano. Vivimos en un mundo donde la mayoría de las personas escogen seguir objetos inánimes, e inventos del hombre en vez de seguir al Dios verdadero. La realidad es que los verdaderos cristianos representan una pequeña minoría de personas en el mundo. Pero ahora la pregunta que debemos hacernos es: ¿cómo puede el creyente fiel sobrevivir en un mundo pagano? Este será nuestro tema de hoy.
Fuisteis enriquecidos en él lectura Bíblica
1 Corintios 1:5-7 – porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia; 6 así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros, 7 de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo.
Como acostumbro a decir, para obtener un mejor entendimiento del mensaje que Dios tiene para nosotros en el día de hoy, nos será necesario hacer un breve repaso de historia. Corintios era la ciudad más importante de Grecia en el tiempo de Pablo. Corintios era un centro bien ocupado de comercio mundial, de cultura degradada, y de religión idólatra.
Ésta ciudad tenía una población de aproximadamente 700, 000 personas, y estaba llena de capillas y templos, pero el más prominente era el templo de Afroditas, que descansaba encima de una colina de 1,800 pies de altura, y los devotos de la “diosa del amor” hacían el uso libre de las 1, 000 prostitutas consagradas.
Éste centro cosmopolita prosperó en comercio, la hospitalidad, el vicio, y la corrupción. Los que buscaban placer iban allí a gastar el dinero en un día libre de la moralidad. Corintios llegó a ser tan notorio por sus males que decir “actuar como un corintio” se convirtió en un sinónimo de la corrupción y la prostitución [3].
Lo que estaba sucediendo es que debido a ésta inmoralidad y corrupción, los corintios estaban destruyendo su testimonio cristiano. Como les he dicho en otras ocasiones, el pecado es como un virus, y extremadamente contagioso. Y fue debido a esto que Pablo escribió ésta para corregir actitudes inapropiadas, y para promover un espíritu de unidad entre los hermanos, sus relaciones y la adoración. ¿Por qué es necesario que sepamos estas cosas?
Es necesario saber estas pequeñeces porque a través de ellas nos damos cuenta que aunque ésta carta fue escrita alrededor del 56 d.C., en realidad las personas no han cambiado mucho, y el mundo se encuentra en más o menos en la misma situación.
Lamentablemente la mayoría de las personas que habitan este mundo han escogido ignorar la palabra de Dios por completo, y lo más triste de todo es que esto no es algo que se aplica solamente al mundo, sino que también se aplica a un buen número de cristianos.
Y es por eso que en 2 Corintios 13:5 encontramos el apóstol Pablo escribió: “…Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?..” Así que manteniendo estos breves detalles en mente continuemos ahora con nuestro estudio para encontrar la respuesta a nuestra pregunta de hoy.
En los versículos que estamos explorando en el día de hoy encontramos la respuesta a nuestra pregunta inicial (¿cómo puede el creyente fiel sobrevivir en un mundo pagano?). Así que examinemos ahora estos versículos detalladamente para determinar lo que tenemos que hacer para poder sobrevivir en un mundo pagano.
Aquí vemos que el Apóstol les dijo a ellos en ese entonces, y nos habla a nosotros de igual manera diciendo: “…porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia…” Y deseo que notemos bien la palabra “enriquecidos” contenida en este versículo.
Deseo que notemos esta palabra porque la riqueza de la que se habla aquí no es la riqueza material, sino que es de la riqueza espiritual. Digo esto porque la palabra “enriquecidos” es una traducción de la palabra griega “ploutizō” (pronunciada plu-tít-só), que también se define como: “de las riquezas espirituales” [4]. Y como les predique la semana pasada, y continuare predicando en todo momento, las riquezas espirituales (bendiciones) son mucho superior a todas las riquezas materiales. ¿Por qué digo esto?
Digo que las riquezas espirituales son mucho superior a las materiales porque la realidad es que con la riqueza material podemos comprar el placer, pero no el amor. Sin embargo, cuando la riqueza espiritual abunda en nosotros entonces sabemos que: “…Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él…” (1 Juan 4:16). Y también sabemos que: “…ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro…” (Romanos 8:39).
Con la riqueza material podemos comprar un espectáculo, pero no la alegría. Sin embargo, cuando la riqueza espiritual abunda en nosotros entonces sabemos que: “…el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo….” (Romanos 14:17).
Con la riqueza material podemos comprar tranquilizantes, pero no la paz. Sin embargo, cuando la riqueza espiritual abunda en nosotros entonces sabemos que: “…Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe…” (Gálatas 5:22). Y también lo que encontramos en Filipenses 4:7 cuando leemos: “…Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús….”
¿Cómo podemos sobrevivir en un mundo pagano?
La respuesta es siempre recordando que: “…en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia…” En otras palabras, nunca olvidándonos que con la riqueza material podemos comprar un crucifijo, pero no un salvador. La riqueza material nos permite o facilita comprar cualquier cosa aquí en la tierra, pero no el cielo.
Continuando leemos: “…así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros, 7 de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo…” ¿Cómo podemos sobrevivir en un mundo pagano? Podemos sobrevivir, y no solamente sobrevivir, sino que también podemos prosperar, cuando reconocemos y completamente confiamos en que: “…nada os falta en ningún don…” Como les dije al inicio, vivimos en un mundo pagano.
Pero a pesar de que estamos rodeados por la maldad, esto no significa que estamos derrotados. La realidad es que a pesar de que estamos completamente rodeados de la maldad, el cristiano fiel tiene tres ventajas que le ayudan a derrotar la maldad, y a prosperar en medio de todo esto.
Enriquecidos en él, pero ¿qué ventaja tenemos?
La primera ventaja
Nosotros poseemos es que el Espíritu Santo mora en nosotros, y cuando permitimos que Él se manifieste en todos los aspectos de nuestra vida, entonces no existe poder ni potestad que pueda derrotarnos. Fíjense bien como esto es algo que queda bien declarado en Romanos 8:37 cuando leemos: “…Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó…» Dile a la persona que tienes a tu lado: somos más que vencedores.
Pero lamentablemente, esto es algo que a muchos de nosotros se nos olvida. En otras palabras, no tomamos provecho de esta gran ventaja que Cristo murió en la cruz para entregarnos. Se nos olvida que somos más que vencedores y a consecuencia sufrimos, nos atemorizamos, nos descorazonamos, y sin darnos cuenta le damos entrada a los poderes de las tinieblas en nuestra vida.
La segunda ventaja
Tenemos es que el Espíritu Santo nos da la valentía y la confianza que necesitamos para enfrentar cualquier situación. En Filipenses 4:13 encontramos que se nos dice: “…Todo lo puedo en Cristo que me fortalece….» Y quiero que notemos muy bien que aquí no dice que podemos hacer algunas cosas y otras no. ¡Aquí nos dice «todo!» Dile a la persona que tienes a tu lado, ¡TODO!
Esto significa que no existe nada que no podamos vencer. Nosotros luchamos en contra de poderes sobrenaturales [5], que por nuestra propia fuerza nunca podremos vencer, pero Dios nos ha entregado Su poder [6]. Dios le entrega a todo cristiano fiel el poder sobrenatural que no solo vence la oposición, sino que derrota toda fortaleza.
Cuando nos mantenemos fiel a Su voluntad, tenemos la promesa de que Él nos entregara la victoria. Fíjense bien como esto queda muy bien declarado en Deuteronomio 28:6-7 cuando leemos: “…Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir. 7 Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti…”
Pero para que esto suceda existe una condición, y ésta condición la encontramos en los versículos anteriores a estos, según leemos en Deuteronomio 28:1 cuando leemos: “…Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra…”
Como podemos apreciar, la condición a cumplir es que tenemos que estar atentos a su voz. ¿Les suena conocido esto que les acabo de decir? Debe sonarles conocido porque eso es algo que predico constantemente. No podemos ser olvidadizos, y no podemos ignorar lo que nuestro padre celestial nos dice en su palabra.
La realidad es que la desobediencia a la palabra de Dios es lo que ha causado maldiciones en la humanidad desde el inicio [7]. No escuchar y prestar atención a la palabra de Dios es lo que ha conducido a la humanidad a llegar hasta este nivel corrupto, y degradado que se encuentra hoy. Dile a la persona sentada a tu lado: hay que prestar atención a la palabra de Dios.
La tercera ventaja
El Espíritu Santo nos guía a la oración. En Lucas 22:39-46, cuando el Señor fue a orar en el monte de Getsemaní, poco antes de ser arrestado y entregado en manos de los gobernadores judíos y romanos, encontramos que el Señor dijo: “…Orad que no entréis en tentación…» Y quiero que nos fijemos bien en que el Señor pidió esto de ellos con un gran propósito.
La realidad es que no es fácil vivir, y/o sobrevivir en este mundo pagano. Las tentaciones que nos rodean, y las presiones sociales y culturales pueden, y en ocasiones nos conducen a participar de cosas que bien sabemos desagradan a Dios. Y es por eso que no es fuera de lo común escuchar como algunos cristianos todavía creen en la adivinación, los horóscopos, y un tantísimo más de cosas que son aborrecidas por Dios [8].
¿Por qué sucede esto? Esto es algo que sucede porque como he dicho en otras ocasiones, el pueblo de Dios sufre por falta de oración. Nuestra vida espiritual sufre por falta de comunicación con nuestro Padre celestial. Dile a la persona que tienes a tu lado: ¡tenemos que orar!
Hermanos, el Espíritu Santo nos guía a la oración porque con la oración podemos conquistar toda oposición. Cuando permitimos que el Espíritu Santo nos guié a la oración encontraremos que la oración trae sanidad, trae prosperidad, nos da esperanza, nos libra de las angustias y nos protege de los ataques del enemigo.
La oración es una cobertura divina de Dios; fíjense bien como nos dice el Señor en Marcos 11:24 cuando leemos: “…Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá…” La oración es el arma más poderosa que existe en el universo, y es la única arma con la que nos podemos defender contra los poderes y potestades de las tinieblas.
Para concluir.
Corinto era una ciudad pagana y el paganismo estaba influenciando a los creyentes. En otras palabras, la presión social y cultural que existía estaba conduciendo a muchos a alejarse de la verdad de Dios.
Esto es algo que queda bien reflejado cuando el apóstol Pablo les escribió diciendo: “…Más bien os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis. 12 Porque ¿qué razón tendría yo para juzgar a los que están fuera? ¿No juzgáis vosotros a los que están dentro? 13 Porque a los que están fuera, Dios juzgará. Quitad, pues, a ese perverso de entre vosotros…” (1 Corintios 5:11-13).
Las presiones sociales y culturales son capaces de desviarnos de nuestro camino, y es por eso que el Señor en Mateo 7:13-14 nos dice: “…Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; 14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan…”
Esforcémonos, y perseveremos siempre en la santidad. Recordemos que a pesar de que vivimos en un mundo pagano, Cristo nos ha entregado la victoria. Recordemos siempre lo que el Señor nos dice en Mateo 10:22 cuando leemos: “…Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo….”
Recordemos siempre lo que encontramos en 1 Corintios 10:21 cuando leemos: “…No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios…”
¿Cómo podemos sobrevivir y prosperar en un mundo pagano? Lo podemos lograr cuando nos alejamos de la maldad, y verdaderamente nos entregamos a Dios.
[1] Diccionario de la Real Academia Española
[2] Encyclopedia Britannica
[3] The Wilkinson & Boa Bible Handbook
[4] Blue Letter Bible Lexicon – Strong’s g4148
[5] Efesios 6:12
[6] 2 Corintios 10:4
[7] Génesis 2:16-17; 3:1-6
[8] Deuteronomio 18:10-12
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