Presta atención

Predicas Cristianas

Predicas Cristianas Prédica de Hoy: Presta atención

Introducción

La semana pasada les hice un breve recuento de algunos de los incidentes drásticos y violentos que habían sucedido durante el año 2012.  Y como les dije al final de la predicación, durante este año que recién comienza, en vez de adoptar determinaciones de dejar, tenemos que adoptar determinaciones de comenzar.  Debemos comenzar a dedicarle más tiempo a Dios, a nuestra familia, y a nuestros hijos.  Debemos determinar que prestaremos atención a la Palabra de Dios, y más importante aún, que comenzaremos a aplicarla en nuestra vida.

La gran realidad es que escuchar, y o leer la Palabra de Dios es algo muy fácil de hacer, pero aplicarla a nuestra vida en ocasiones se nos dificulta.  ¿Por qué se nos dificulta?

Se nos dificulta porque a la mayoría de nosotros NO nos gusta ser el centro de atracción, es decir, no nos gusta ser destacados de entre la multitud.  Pero el problema que existe con esto es el que les mencione la semana pasada; si tu fe no ha producido algún tipo de incomodidad o tribulación en tu vida, entonces estas haciendo algo muy, pero muy mal.  ¿Por qué digo esto?

Lo digo porque la gran realidad es que el creyente está llamado a ser completamente lo opuesto de cómo el mundo es [1].  Y es por eso que a pesar de las presiones, y/o momentos de tribulaciones que nuestra fe pueda producir, tenemos que poseer la convicción de que aunque vivimos en este mundo, el creyente fiel no es de este mundo, y que nuestro Padre celestial está atento y protegiéndonos del mal [2].

Pero para que esto suceda, para que podamos experimentar la presencia, majestad, y poder de Dios en nuestra vida, para que podamos recibir las bendiciones que Él desea derramar sobre nosotros, existe algo que tenemos que hacer.  ¿Qué tenemos que hacer?  Este será el tema que estaremos explorando en el día de hoy.

Pasemos ahora a la Palabra de Dios.

Deuteronomio 28:1-1Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. 2 Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.

Presta atención

No sé cuantos de ustedes prestan atención a las modas, juegos, y estilo de vida que son comercializados y presentados a nuestros hijos, y a la sociedad en general.  La realidad es que la mayoría de los padres están tan ocupados y atormentados con el estado financiero de su hogar, que raramente prestan atención a lo que se les presenta a nuestros hijos.

La mayoría de las personas no logran ver los mensajes de adoctrinamiento que están siendo lentamente introducidos en los hogares, y en la mente de la juventud.  No es que yo esté en contra de la televisión, los libros, y las películas de Hollywood.

A mí también me gusta sentarme con mi familia y disfrutar de un buen programa en la televisión, o de una película, o leer un buen libro.  Pero de lo que me he dado cuenta es que a través de los medios de entretenimiento y comunicación, nuestro enemigo esta lentamente envenenando la mente de la humanidad, y desdichadamente esto es algo que también está sucediendo en el hogar cristiano.

Nuestro enemigo esta lentamente guiando a muchos a la apostasía, en otras palabras, a alejarse de la verdad de Dios.  Lentamente pero de manera muy segura, el enemigo está conduciendo a la humanidad a la violencia, perversión, y finalmente a la destrucción.

Presta atención

Los valores cristianos, principios familiares, y la ética están siendo eliminados de la mente de nuestra juventud, y aquellas cosas que aparentan intrigante e inocente, o quizás una moda pasajera, esta corrompiendo la mente de un gran número de creyentes.

¿Qué podemos hacer nosotros para evitar que esto suceda en nuestra vida?  ¿Qué puede hacer un creyente  para evitar que las fuerzas del maligno penetren las paredes de su hogar y corrompan su mente? Las respuestas a ambas preguntas las encontramos en los versículos que estamos explorando en el día de hoy.

Fíjense bien lo que la Palabra de Dios nos dice aquí cuando leemos: “Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra…

¿Cuántos pueden ver las respuestas?  Hermanos, la respuesta a ambas preguntas es escuchar atentamente la voz de nuestro Dios.  Dile a la persona que tienes a tu lado: presta atención.

La realidad es que si no prestamos atención a lo que Dios nos dice; si no estamos atentos a Su voz, tarde o temprano caeremos enredados en las trampas del enemigo [3].  Caeremos enredados en la trampa de desobediencia, corrupción moral, y desunión familiar.

Como he dicho en otras ocasiones, y todos ustedes saben, estamos peleando una guerra espiritual [4], y el campo principal de batalla es nuestra mente.  El enemigo sabe que si puede implantar pensamientos y sentimientos aborrecidos por Dios, entonces le será muy fácil destruirnos y separarnos de las bendiciones que Dios quiere derramar sobre Su pueblo.

La Palabra aquí nos dice: “…si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios…” 

Pero la voz de Dios está siendo lentamente ahogada, y silenciada, y esto es algo que ninguno de nosotros podemos permitir que suceda en nuestra vida.  Dile a la persona que tienes a tu lado: presta atención.

Tenemos que estar muy atentos a la voz de Dios porque de no hacerlo, entonces podemos ser fácilmente tentados y seducidos por las cosas que ofrece el mundo.  Y una vez que esto sucede, entonces el enemigo de las almas logra bloquear que recibamos las bendiciones que Dios desea derramar sobre Su pueblo.

Esto es algo que he venido repitiendo desde el comienzo de este ministerio.  No podemos permitir que los poderes de las tinieblas bloqueen las bendiciones de Dios; sin embargo, existen muchos que lo permiten.  ¿Por qué permiten que los poderes de las tinieblas bloqueen las bendiciones de Dios?

Lo permiten porque no están escuchando los mensajes que Dios nos revela a través de Su santa y divina Palabra, y quizás más importante aún, no aplican lo que han aprendido.  Existen muchos que continúan pensando que no importa lo que hagan continuaran recibiendo bendiciones, pero si has pensado así, siento decirte que te equivocas.

Te equivocas porque al igual que aquí vemos que el Señor nos dice: “…Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán…”, cuando continuamos leyendo lo que Moisés le dijo a ese pueblo, también vemos que el Señor dijo: “….Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán….” (Deuteronomio 28:15).  Dile a la persona que tienes a tu lado: la desobediencia produce maldición.

La mayoría, sino todas, las cosas horribles que estamos presenciando acontecer están directamente relacionadas con el hecho de que la humanidad ha dejado de escuchar la voz de Dios.

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La depravación moral, la falta de principios honrados, y la desfachatez que estamos presenciando en nuestra sociedad están directamente relacionadas a que nuestra sociedad ha tratado de ahogar y silenciar la voz de Dios.

Pensemos en lo que les acabo de decir por un breve momento para determinar si lo que les digo tiene sentido o no.

Esta generación, es decir nuestra generación, creció aprendiendo de todo, menos de Dios. La realidad es que no todos tuvimos el privilegio de tener padres y madres que se ocuparan y preocuparan por lo que hacíamos y pensábamos.

Ahora bien, no es que los padres de hoy no quieran a sus hijos, pero la realidad es que vivimos en un mundo donde ambos padres tienen que trabajar para poder sostener un hogar; vivimos en un mundo donde ambos padres llegan a la casa cansados y agotados, y el resultado que esto produce es que le fallan a los hijos y la familia en general.  ¿Por qué digo que les fallan?

Les fallan porque el cansancio, las preocupaciones, y las presiones les detiene de dedicarle el tiempo necesario que ellos requieren.  En otras palabras, muchos dependen en que sus hijos y seres queridos serán educados en las escuelas, o a través de programas educativos y quizás religiosos en la televisión.  Pero debemos detenernos por un breve momento y preguntarnos: ¿qué están aprendiendo?

No sé a cuantos de ustedes les ha pasado esto, especialmente a los que tienen niños chiquitos, o quizás sean abuelos, tíos, tías, y demás, pero en ocasiones los niños dicen cosas que nos dejan sorprendidos, y nuestra pregunta siempre es ¿dónde aprendiste eso?

Cuando tomamos el tiempo de hacer esa pregunta y de escuchar, en la mayoría de las ocasiones encontraremos que no han aprendido algo de solo un lugar, sino que fue en una combinación de lugares.

Encontraremos que han aprendido cosas malignas que van directamente opuestas a lo que nos enseña la Palabra de Dios, y que estas cosas han sido reafirmadas y fortalecidas por las amistades, programas de televisión, películas de cine, libros, y demás.  ¿Por qué sucede esto?

Esto es algo que sucede porque muchos no logran ver el peligro en las cosas.  Muchos no logran ver la mano del enemigo en las cosas, sino que confían en que las cosas que suceden a su alrededor son solo una moda pasajera, o que son cosas inofensivas.  Pero las modas pasajeras son las que exponen a mujeres casi desnudas, aún cuando la temperatura esta a casi el nivel de congelación.  ¿Creen que exagero?

Les aseguro que no estoy exagerando, y todos los que vieron la programación de fin de año de Times Square en New York, saben muy bien que no estoy exagerando.  Con temperaturas a casi el nivel de congelación, un poco después de las doce de la noche, hubo una exhibición de mujeres en trajes de baño, si se les puede decir trajes de baño a lo que llevaban puesto, que no le permitían nada a la imaginación.

Ahora pregunto, ¿qué tiene que ver mujeres semidesnudas con la celebración del fin de año?  Para aquellos que no ven el peligro en las cosas, y la mano del maligno a su alrededor, dirán: bueno, fue solo una exhibición por los modistas para presentarnos los nuevos diseños de trajes de baños para el nuevo año.  ¿Puede ser esto verdad?  ¿Puede esta presentación ser tan inocente como la quieren hacer lucir?

La respuesta es ¡NO!  Estas son cosas que degradan a la mujer, y les da la apariencia de rameras y no de mujeres decentes.  No creo que también tenga que hablar acerca de los pensamientos y sentimientos que este tipo de espectáculo produce en la mente de los hombres, ¿verdad?

Las modas pasajeras y los estilos de vida modernos son los que promueven la promiscuidad, destruyen principios morales, y destruyen hogares.  ¿Creen que exagero?  Hablaba yo con un creyente hace un tiempo atrás, y vi que tenía en su mano un pequeño libro con un titulo un poco raro.  Le pregunte qué era el librito, y me contesto que era una novela de amor que estaba leyendo.

Le pregunte de qué se trataba, y me dijo que se trataba de una mujer que vivía con tres maridos a la misma vez que había quedado embarazada, y que no sabía cuál de los tres era el padre.  Entonces le pregunte que como podía continuar leyendo algo de esta índole, y me contesto que la razón era porque la había encontrado intrigante y deseaba saber por fin quien había sido el padre de la criatura.  No creo que tenga que decir mucho más de esto, ¿verdad?

Para concluir. 

Recordemos que Cristo no murió en la cruz para que fuéramos parte de este mundo de maldad, Él murió en la cruz para que ahora vivamos en el reino de Dios.  Recordemos que: “…no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación… (1 Tesalonicenses 4:7).

Tenemos que amoldar nuestro corazón, según Dios y no según las cosas de este mundo.  Y solo existe una manera de lograr esto.  ¿Cómo podemos lograr amoldar nuestro corazón, y el corazón de nuestros hijos, y las personas que amamos?  Lo podemos lograr cuando estamos atentos a la voz de Dios, y cuando guardamos Su Palabra.

Existen muchas cosas que tratan de distraer nuestra atención; el maligno usa un sin número de tácticas para separarnos de Dios y bloquear las bendiciones que Él quiere derramar sobre su pueblo, pero su estrategia es la misma.  Su estrategia es “divide y conquista”.

Recuerden siempre: “…Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. 2 Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios….”  Dile a la persona que tienes a tu lado: presta atención.

[1] Romanos 12:2; 1 Pedro 1:13-15
[2] Juan 17:15-17
[3] Gálatas 5:19-21
[4] Efesios 6:12
[5] Santiago 1:14

© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.

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