Apartarán de la verdad el oído
No sé cuántos están atentos a eventos recientes, pero les digo que las cosas van de mal en peor, y apresuradamente. En enero, el estado de Oregón silenciosamente promulgo una política que ha dejado a muchos padres atónitos, y que ahora es cuando se están enterando de ella. La política promulgada es que niños de 15 años de edad pueden obtener operaciones de cambio de sexo, sin el consentimiento de sus padres, y subsidiadas por el Estado [1].
Como todos sabemos, el 6 de junio, la Corte Suprema decidió por un voto de 5 a 4, que la Enmienda 14 de la Constitución garantiza el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo [2]. La realidad es que yo no soy un experto, pero según lo que he podido encontrar, la Enmienda 14 fue aprobada en 1868, y en esa época la homosexualidad era un delito en todos los estados dentro de la unión.
Sin embargo, los jueces determinaron que bajo la Enmienda 14, los Estados tienen que emitir licencias de matrimonio a parejas del mismo sexo y reconocer las uniones del mismo sexo que se han realizado legalmente en otros Estados [3].
Esto significa que ahora los todos los Estados tienen que emitir licencias de matrimonio, y reconocer matrimonios que se realizaron en otros Estados, a pesar de cualquier ley estatal que pueda existir en contra de matrimonios por personas del mismo sexo.
Ahora debemos preguntarnos, ¿Por qué ha sucedido esto? ¿Por qué ha sucedido esto en esta nación, que fue fundada en principios cristianos, y donde un 70.6% de las personas se identifican como cristianos [4]? La respuesta quizás los deje un poco molestos.
La razón por la que esto ha sucedido en esta nación, es porque la opinión pública en cuanto a este sujeto ha cambiado drásticamente. En el sondeo de Pew de Investigación del 2001, los estadounidenses se opusieron a los matrimonios del mismo sexo por un margen de 57% a 35%. Sin embargo, desde entonces el apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo ha crecido.
Hoy en día, la mayoría de los estadounidenses (57%) apoyan el matrimonio entre personas del mismo sexo, en comparación con el 39% de los que se oponen a ella [5]. Y todo esto a pesar de que las tres mayores religiones en este país, (cristianos, islámicos, y judíos), se oponen por completo a relaciones homosexuales. ¿Qué esta sucediendo en esta nación, y alrededor del mundo? Este será el tema que estaremos explorando en el día de hoy.
2 Timoteo 4:3-4 – Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4 y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.
Esta pequeña porción de las escrituras nos revelan claramente lo que esta sucediendo en esta nación, y lo que esta sucediendo alrededor del mundo. Y lo que estamos viendo suceder tiene un nombre, el cual es “apostasía”. La razón por la que digo esto es porque como les dije previamente, vivimos en una nación donde el 70% de las personas se identifican como cristianos, sin embargo, el 57% de los estadounidenses apoyan, o están de acuerdo, con el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Esto es algo que atrofia la mente, porque después de todo, ¿cómo pueden haber tantos cristianos que estén en completo acuerdo de ir en contra de la palabra de Dios? Hermanos, el homosexualismo es abominación [6], y el matrimonio es definido en la biblia como entre un hombre y una mujer [7].
Si nos llamamos cristianos, si realmente creemos en la palabra de Dios, entonces no podemos apoyar lo que va en directa oposición a la voluntad de Dios. No sé cuántas personas leerán o escucharán esta predicación, pero para todo aquel que la lea o escuche, deseo que se examinen y pregunten asimismo, ¿puedo llamarme cristiano e ir en contra de la palabra de Dios?
Cuando se es honesto con uno mismo, la respuesta es un redondo ¡NO! Despierten pueblo de Dios, no se puede estar con Dios y con el diablo a la misma vez [8]. Si no estas seguro de que decisión apoyar, o si estas de acuerdo o apoyas la opinión pública, entonces tienes que darte cuenta que estas a punto de apostatar, o quizás has apostatado. Para que entiendan bien el punto que les estoy haciendo, examinemos ahora la definición de la palabra apostasía.
Según el diccionario de la Real Academia Española, “apostasía” es el hecho de “apostatar”, cuya definición es “1. Negar la fe de Jesucristo recibida en el bautismo. 2. Dicho de un religioso: Abandonar irregularmente la orden o instituto a que pertenece. 3. Dicho de un clérigo: Prescindir habitualmente de su condición de tal, por incumplimiento de las obligaciones propias de su estado. 4. Abandonar un partido para entrar en otro, o cambiar de opinión o doctrina.
Igualmente, cuando buscamos en el léxico griego vemos que la palabra apostasía es una traducción de la palabra griega ἀφίστημι (pronunciada: afis-téi-mi), y su definición es: hacer apartarse; causar a retirarse; remover; excitar a la rebelión; apartarse; abandonar; caer; convertirse infiel. Así que como podemos ver, la palabra apostasía perfectamente describe lo que esta sucediendo en el mundo de hoy, especialmente en la comunidad cristiana. ¿Por qué digo esto?
La razón por la que digo esto es porque los versículos que estamos examinando hoy están completamente dirigidos a los cristianos. Los versículos que estamos examinando hoy están completamente dirigidos a la iglesia, y sirvieron de advertencia a la iglesia de antigüedad, y nos revelan a nosotros claramente lo que esta sucediendo en la iglesia de hoy.
Lo que esta sucediendo en la iglesia de hoy, es decir, los creyentes hoy en día, es que como las estadísticas indican, un gran porcentaje de los cristianos de hoy se han apartado de la verdadera doctrina para seguir doctrinas de hombres. Y es por eso que no es fuera de lo común encontrar como congregaciones han cambiado la gracia por la ley, y el arrepentimiento por la prosperidad. Creo que es por esta misma razón que el Señor en Lucas 18:8 declara: “…Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?..”
Si las cosas en el mundo continúan yendo en el camino que van, cuando el Señor finalmente regrese el número de verdaderos cristianos será una pequeñísima fracción. Hoy en día existen muchos que se llaman cristianos, pero esto es solo un título inmerecido que se han otorgado.
Digo esto porque ser cristiano no es solamente decir que somos cristianos, ser cristianos es mantenerse fiel a Dios, y ser hacedores de Su palabra [9]. Nunca nos olvidemos que el Señor le advierte todo cristiano que no todo el que profese ser cristiano entrará en el reino de los cielos, sino solo aquellos que hacen la voluntad de Dios [10]. No nos mintamos a nosotros mismos, solo aquellos que se mantengan fiel a la palabra de Dios permanecerán en la presencia de Dios.