Tiempos difíciles
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Predicas Cristianas
Predica de Hoy: Tiempos difíciles
Predicas Cristianas Texto bíblico: Marcos 4:35-41
Introducción:
Estamos en medio de tiempos determinantes e inusuales. Enfrentamos días difíciles, dónde el mundo entero ha sido afectado. Comparado a lo que esta sucediendo alrededor del mundo, muchos nos hemos dado cuenta que los problemas que creíamos que eran problemas, en realidad no lo son.
Pero Dios ha estado preparando a hombres y mujeres comprometidos con Él precisamente para momentos determinantes como estos. Hijos de Dios disciplinados estratégicamente en todas las áreas para ir más allá de las tormentas que puedan haber en el camino.
Nunca podemos dudar que dentro de nosotros, en nuestro espíritu, poseemos herramientas útiles y poderosas en Dios para atravesar estos días y terminar victoriosos en todas las áreas de nuestra vida.
Como hijos de Dios debemos saber que la guerra espiritual no ha terminado aún, pero tampoco se ha acabado la unción y la revelación de Dios hacia sus hijos.
Hoy más que nunca todo creyente fiel necesitamos estar enfocados, y vivir con el discernimiento espiritual activo, para saber el momento que Dios tiene para su iglesia en estos días.
Y es exactamente por eso que en Hebreos 2:1 encontramos que se nos dice: «Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos.» En otras palabras, tenemos que prestar más atención a lo que escuchamos no sea que caigamos en las mentiras del diablo.
I. ¿Qué debemos enfrentar en estos tiempos difíciles?
Debemos enfrentar la ignorancia de lo que estamos viviendo. Es decir, no dejarnos llevar ni arrastrar por todo lo que nos dicen en las noticias [1]. No podemos dejar caer nuestra guardia, tenemos que estar muy atentos y velando en todo momento [2].
Como hijos de Dios [3], tenemos que usar Su palabra para filtrar todo lo que escuchamos. Nunca nos olvidemos que la palabra de Dios nos dice: «Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.» Oseas 4:6a. La realidad del caso es que la ignorancia nos conduce nuevamente a la esclavitud. En otras palabras, a conducir una vida llena de preocupaciones, y te desenfoca del mensaje del reino de Dios.
Hijos de Dios en tiempos difíciles
Como hijos de Dios, todos los días nos enfrentamos a un sistema mundano que quiere atraparnos y hacernos esclavos. Es un sistema corrupto y torcido inclinado a lo malo. El sistema mundano es un sistema completamente opuesto a la palabra de Dios. El sistema mundano es algo que va en contra de todo propósito de Dios para el hombre.
Cada día de nuestra vida debemos estar completamente convencidos que ganaremos la batalla. Nuestro enemigo, el diablo, fue vencido por el Señor [4]. Así que legalmente el diablo está vencido. Pero ilegalmente anda buscando a quien engañar y destruir [5]. Así que yo te digo en el día de hoy: asegúrate de que no sea a ti. Dile a la persona que tienes a tu lado: cuidado.
II. ¿Qué tenemos que hacer en estos tiempos difíciles?
Debemos armarnos con la palabra de Dios en el conocimiento de quienes somos en el Señor [6]. Satanás anda como león rugiente, para devorar a quienes no conocen su posición en Cristo, o en su relación con Dios.
Pero nosotros conocemos nuestra identidad y para que fuimos llamados. Recordemos siempre lo que nos dice la palabra en Jeremías 51:20 cuando leemos: «Martillo me sois, y armas de guerra; y por medio de ti quebrantaré naciones, y por medio de ti destruiré reinos.» Dile a la persona que tienes a tu lado: eres un arma poderosa para el Señor.
Pero hermanos, decir que somos hijos de Dios no es suficiente para combatir estos momentos oscuros. Para vencer tenemos que caminar en la autoridad que nos fue dada por nuestro Señor Jesucristo [7].
Hermanos debemos salir de este momento tan peligroso y hostil con gozo y buenas noticias, tal como lo hizo Cristo. Cuando hacemos esto, al diablo no le quedara más remedio que apartarse de los creyentes que tienen convicción de quiénes son en Cristo. Nunca nos olvidemos que somos su especial tesoro, reyes y sacerdotes; la sal del mundo. Tenemos un llamado eterno y poderoso.
Hoy en día vivimos aislados debido a la pandemia, así que es muy importante que aprendamos a combatir el aislamiento. En otras palabras, una cosa es estar separado físicamente, y otra cosa es aislado espiritualmente desenfocado del propósito de Dios.
La biblia dice que una sola persona es débil y puede ser derrotada. Pero dos pueden defenderse, y si tres unen sus fuerzas ya no será fácil vencerlas [8].
III. Solo eres débil (Eclesiastés 4:10)
El enemigo buscará aislarte porque así eres débil de sus maquinaciones. Hoy más que nunca debemos seguir unidos con nuestros hermanos en comunión buscando de Dios.
Ya no hay excusas de transporte, ni de gasolina, ni de dinero, etc. Podemos reunirnos sin excusas a través del Internet o una llamada y seguir conectados en Su presencia.
No puedes orar en temor, no puedes conducirte en temor, en miedo.
En el Salmo 23:4 la palabra de Dios nos dice:»Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.» Dile a la persona que esta a tu lado: Dios siempre está con nosotros. Hermanos, y: «Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?» (Romanos 8:31).
No estamos solos; ora con tu familia, y con tus hermanos en la fe, para que rechaces todo temor que quiera sacarte del foco, y así detenerte en este tiempo. En estos momentos difíciles los verdaderos hijos(a) de Dios saldremos con las manos llenas, con más fuerzas, fortalecidos en la fe, llenos del Espíritu Santo y en comunión con los hermanos.
Pero para que esto suceda, tenemos que vernos de la manera que Dios nos ve. Dios nos ve capaces, valientes y muy útiles en Su reino. Cuándo el ángel de Jehová se le apareció a Gedeón le dijo: «Jehová está contigo, varón esforzado y valiente.» (Jueces 6:12-14). Fue en ese momento que Dios lo llamó para enfrentar lo que más temía. Y de esta misma manera Dios te llama a ti hoy.
Hermanos, así nos está llamando Dios en estos días. Dios nos llama a salir de la rutina espiritual, y abrir nuestros ojos para ver más allá de lo visible [9]. Nuestra mirada tiene que estar en el cielo, porque en el cielo no hay escasez, ni muerte, ni hambre, ni enfermedad, ni pérdida, etc.
Para concluir
Cuando caminas en integridad bajo el poder del Espíritu Santo, no importa la situación de la tierra, si hay escasez o no. Recordemos que Dios siempre obrará a nuestro favor [10]. Por eso caminemos conscientes de quienes somos en Dios, y estemos atentos a lo que su Espíritu quiere hablarnos diariamente.
No seamos incrédulos, no te juntes con personas tóxicas que caminan según lo que el mundo diga, rodearte de hombres y mujeres de fe llenos del Espíritu Santo.
No te rindas porque Dios tiene el control y te dará todo lo que necesites [11]. Sigue siendo fiel y agradecido en el lugar dónde Dios te puso. Recuerda siempre que a pesar de las circunstancias que podamos pasar, Él está contigo como poderoso gigante.
[1] Génesis 3:1
[2] Hechos 20:29-31
[3] Juan 1:12-13
[4] Juan 16:33
[5] 1 Pedro 5:8
[6] 1 Pedro 2:9
[7] Lucas 10:17-19
[8] Eclesiastés 4:12
[9] 2 Reyes 6:17
[10] Jeremías 29:11
[11] Mateo 6:31-33; Lucas 12:29-31
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